El fin de semana empieza cuando uno sale de la escuela y así fue, el viernes saliendo de clases después de estar esperando en la cafetería a que bajara la lluvia nos fuimos al metro un par de amigos y yo, el punto es que en Copilco se sube un señor, borracho y tomando tequila en un vaso de medio litro (el vaso estaba a como 1 octavo), luego de un poco de desmadre y habladurías el don se nos acerca y nos ofrece, llevaba una botella en la chamarra a la cual le quedaba como un tercio, no dio un vaso y de ahí tomamos, nos bajamos después de una experiencia de esas bien raras y cada quien se fue a su casa.
El sábado me lanze al beisbol con mi papá el cual estuvo pasado por lluvia, pasamos a la parte techada del Foro Sol y vimos todo lo que restaba del partido (de la 3a a la 8va cuando se canceló), después de una media hora de espera se decidio dar por terminado el juego.
Ayer domingo, fuimos a desayunar a unos huaraches que estan en tezontle los cuales solo tienen de rescatable los frijoles, están más grasosos los huaraches que los del Mercado de Jamaica (que ya son bastante grasosos), después de este asunto fuimos a Parque Tezontle a encontrarme con algo bastante divertido, un Seven Eleven en una plaza, así es, un Seven Eleven dentro de una plaza, algo que nunca pense ver.
En resumen mi fin de semana algo bizarro
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